lunes, 4 de octubre de 2010

LA MUNDIALIZACION. Primera parte. Lección para políticos ,economistas y responsables empresas mercado continuo.

www.angelgimeno.com

Colectivo "ECONOMISTAS ATERRADOS"

LA MUNDIALIZACION: Primera parte

Dedicado a los amigos de Internet, miembros del Gobierno de España, Presidentes de Comunidades Autónomas y responsables de las empresas del mercado continuo.


Antecedentes de la mundialización


No tengo la menor duda de que en esta España política de pandereta, muy pocos saben lo que significa este concepto, a pesar de haber sido el terremoto que ha conmovido los cimientos de la economía mundial, dejando a los Gobiernos completamente paralizados tras las crisis financieras de 1997-1998 y  la sistémica de 2007 que durará hasta 2020 si no hacemos las cosas bien.

La mundialización surge como consecuencia de la combinación de la extensión del capitalismo por el mundo en su forma industrial y la aplicación de la política americana de apertura financiera y comercial.

Corrientes comerciales a escala mundial han habido desde hace muchísimo tiempo. La mundialización es algo distinto. Centros de poder en áreas geográficas distintas con todo lo que conllevan.

Lo que es nuevo y cambió las reglas de juego a lo largo del periodo que va de 1985 a 1995, fue una arriesgada combinación de liberalismo financiero con un desmantelamiento aduanero generalizado tutelado por los EEUU, que puso bajo su dirección organizaciones internacionales de la importancia del FMI y el Banco Mundial, debilitando otras como UNESCO, CNUCED y OMS.

EEUU consiguió en este tiempo que desaparecieran las barreras a los movimientos de capitales en todo el mundo, salvo China, y a la vez logró la centralización del libre cambio institucionalizado a través de la Organización Mundial del Comercio.

Sin lugar a dudas fue una victoria ideológica a corto plazo, al convencer al mundo de que la liberalización financiera era buena para todos cuando era una política al servicio de sus intereses particulares.


El siglo XXI no será el siglo americano


No saber diferenciar los objetivos a corto plazo con los desafíos a largo, propios de una realidad estratégica imperial, fue un error mayúsculo que ha provocado que el siglo XXI, que parecía ser el siglo americano, dejara de serlo.

No creo que Clinton y Rubin se dieran cuenta realmente de lo que hacían al intentar liberalizar los movimientos de capitales a nivel mundial.

El periodo que va de 1997 a 2007 ha sido un desastre para EEUU. Las guerras de Irak y Afghanistan con la finalidad de reafirmar su poder militar han acelerado la crisis de su hegemonía económica y consecuentemente han acelerado el fracaso de lo que en 1992 considerábamos sería el siglo americano.

EEUU seguirá teniendo un peso importante en el mundo, pero la autoridad imperial que ejerció tras la caída de la URSS durante un periodo de algo menos de diez años ha desaparecido completamente.


España desvertebrada en el momento de la verdad 


Se ha abierto ante nosotros un siglo de naciones y la España desvertebrada y rota de cuarenta y seis millones de habitantes, a la que nos ha dirigido inconscientemente Zapatero con su frivolidad e ineptitud, debería tenerlo muy en cuenta.

Nuestros mediocres dirigentes políticos deberían tener muy claro el valor que tiene la unidad de España. Una Catalunya que llegara a alcanzar diez millones de habitantes, nunca sería nada en el contexto de la mundialización. Los países pequeños no cuentan en un siglo en el que el Estado Nación será el sujeto válido de soberanía. 

Nuestro Estado de las Autonomías devora el 70% del Presupuesto total del Estado y va casi por libre. Lo único que lo limita en parte es la capacidad del Estado para impedirle endeudarse en Deuda Pública Autonómica.

Ya hace mucho tiempo que el monstruo está moribundo. El Estado de las Autonomías, del que Giscard d´Estaing dijo que Francia no se podía permitir tanto despilfarro propio de un país rico, solo ha servido para que unas 500 personas físicas y jurídicas en buena medida corruptas, vivan a costa de las Autonomías, tras convertir el Mercado Único Español en diecinueve Mercados autonómicos, sin importarles lo más mínimo que España y las propias Comunidades entren en quiebra.

Ya no podemos admitir fábulas como que las Comunidades Autónomas acercan la gestión de la administración a los ciudadanos, lo que es mentira, y echemos a todos los sinvergüenzas que han convertido las Autonomías en las 19 Cuevas de Alí Babá y los 500 ladrones. Y hablo con la propiedad del que conoce este mundo por dentro.

Lo que debemos hacer en el proceso de Regeneración de España es enterrar cuando antes el Estado de las Autonomías tal cual es hoy, retornando a La Administración Central las transferencias que no debieron cederse jamás y dotándole de los recursos que precisa para poder ejercer su soberanía en el contexto que la mundialización nos ha puesto delante.


El siglo XXI va a ser un siglo político diferente al que preveíamos hace diez años


Ante nosotros se abre un siglo de naciones. Al desaparecer el imperio norteamericano, el concepto de soberanía nacional recobra su sentido. 

China y Rusia fueron los primeros en darse cuenta, pero no han sido los únicos. A Europa le toca analizar urgentemente lo que ha pasado y empezar a sacar conclusiones de lo vivido de 1991 a 2007, que comienza con la crisis financiera de 1997 y el desastre de la intervención en Iraq en 2005.

Como en todos los procesos históricos, la visión clara de lo que ha sucedido se irá mostrando poco a poco a través de los efectos políticos, económicos, culturales e intelectuales que todavía están apareciendo. 


Las causas del descalabro norteamericano 


Son muchas, pero creemos que de todas ellas podemos destacar las cinco siguientes:  

Primera.- El dominio americano sobre la economía mundial cae estrepitosamente en la crisis financiera de 1997 a 1999, que ni fue capaz de prevenir y mucho menos de impedir su expansión. El hundimiento de las opciones liberales en Rusia en 1998, el contagio a Iberoamérica con las crisis brasileña de 1999 y la de Argentina en 2001, debilita la hegemonía norteamericana y provoca reacciones estratégicas de los afectados e incluso no afectados, que conducen al cuestionamiento del orden político-económico, que EEUU había intentado crear desde finales de los 80.

Segunda.-La crisis del dominio ideológico que provoca la crisis financiera de 1997-1999 que acabamos de mencionar, da lugar a una fuerte oposición mundial al orden económico que había deseado montar Washington en torno a la Organización Mundial del Comercio, que desde entonces va de fracaso en fracaso. La liberalización de la Agricultura y los Servicios, ya no podrá tener lugar en los próximos años.

Tercera.- La utilización del poderío militar norteamericano simplemente con el objeto de reafirmar su poder en Kosovo e Iraq, solo han traído como consecuencia mostrar su debilidad militar y su aislamiento político internacional.

Cuarta .- El proyecto americano de debilitar a Rusia  e integrarla en su órbita de influencia ha sido otro desastre al no poder impedir su renacer como potencia soberana. Este fracaso ha dejado a EEUU desprotegido frente al surgimiento de China como potencia, que desde 1998 se acelera de forma progresiva.

Quinta .- Las crisis financieras han sido con toda seguridad la puntilla que ha acabado con la pretensión norteamericana de mantener su hegemonía económica mediante la liberalización financiera internacional.


Las consecuencias de  la falta de credibilidad de EEUU


La devaluación del baht  thailandés el 2 de julio de 1997, la devaluación del real brasileño al comienzo de 1999, a pesar de los esfuerzos del Fondo Monetario Internacional por impedirlo, demostraron la debilidad de los instrumentos existentes al servicio de los EEUU para avanzar en la liberalización financiera a escala mundial.

Las crisis asiáticas, de Rusia e Iberoamérica, se debieron a las transformaciones de los sistemas económicos y bancarios inducidos a instancias de EEUU al forzar la puesta en marcha de la liberalización financiera internacional.

La volatilidad especulativa extrema de los mercados financieros internacionales desde los años 90 hay que apuntársela en el debe de las políticas inspiradas por EEUU con la finalidad de garantizar su crecimiento económico.

Las consecuencias de estos errores, provocaron decisiones financieras proteccionistas de Malasia y Rusia, revueltas en Argentina y con toda seguridad el nacimiento de líderes como Chávez, Evo Morales y la sorprendente evolución de Rusia bajo la Presidencia de  Vladimir Putin.

Los países que pusieron en marcha políticas monetarias proteccionistas como Malasia y Chile fueron los que salieron mejor de las crisis.

EEUU puso en marcha estructuras a nivel internacional que luego fue incapaz de controlar. No puede extrañarnos que sus proyectos hegemónicos se hayan venido abajo al crear una criatura, la liberalización financiera internacional, que ha terminado devorando a su creador.

La consecuencia más seria de la crisis ha sido la apertura de un debate público a nivel internacional sobre la pertinencia de la liberalización financiera impulsada por EEUU. 

El resultado de la discusión ha sido entender sin duda alguna que el  corazón del problema de la mundialización fue la desregulación del movimiento de capitales a corto plazo. Y una buena parte de la solución será volver a regular estrictamente estos movimientos de capitales a corto, digan lo que digan los mercados financieros.

Otra consecuencia importante provocada por la falta de respuesta adecuada a las crisis monetarias mencionadas, fue el cambio de estrategia económica por parte de los países industrializados de Asia. Estos países al ver con claridad la incapacidad norteamericana para controlar el espacio financiero mundial, han hecho lo posible por desendeudarse lo más rápido que han podido, para alejarse de su exposición al riesgo financiero internacional.

Y lo han hecho reduciendo de manera urgente su consumo interior y poniendo en marcha políticas de exportación muy agresivas que han tenido éxito.

Podemos considerar que en los años que van del 2000 al 2010 el comercio internacional de los países asiáticos, Rusia y algunos países iberoamericanos sufre un giro depredador, de forma tal que mientras EEUU y EUROPA continuaban aumentando su deuda exterior e interior, ellos por el contrario se convertían en prestamistas internacionales y disminuían su deuda externa.

Y de ahí nuestros problemas actuales de desempleo insoportable y camino irreversible a una deflación generalizada en Europa y EEUU si no ponemos remedio a la situación.


El totum revolutum actual


Dando un salto en el tiempo, lo que está ocurriendo hoy día es que EEUU, Canadá, Brasil, Argentina y Perú entre otros, tratan de defender sus posiciones devaluando sus monedas, para convertirse en nuevos depredadores en el mercado internacional, provocando inevitablemente confrontaciones de entre las cuales podemos destacar la existente entre China y EEUU, que puede acabar como el rosario de la aurora.

No es nueva esta situación, pues repite esquemas proteccionistas vividos en los años 30 que condujeron a la gran depresión.

Curiosamente Europa parece estar en el guindo, al margen de estos movimientos, viendo como se aprecia el euro frente a todas las monedas importantes del mundo, sin que la Unión Europea haga lo más mínimo por corregir una situación que junto a las medidas de reducción generalizada del déficit nos lleva inevitablemente a una gran recesión europea con los subsiguientes problemas de aumento del desempleo y reducción del Estado de Bienestar en todos los países de la Unión.

Si a esto añadimos la defensa irracional del euro por el Banco Central Europeo y la Unión Europea dirigida ideológicamente por Alemania, sacrificando cualquier objetivo que no sea el de la reducción del Déficit y la Deuda en todos y cada uno de los países europeos importantes, podemos deducir que vienen tiempos muy difíciles y duros  para Europa, que terminarán chocando de forma violenta con los deseos de los ciudadanos. Y si no al tiempo.  

Para no alargarnos, terminamos aquí la primera parte de este trabajo dedicado a la mundialización, que continuaremos mañana indicando lo que se podría hacer desde la Unión Europea para no ser una hoja que lleva el viento de la mundialización donde quiere.

Si Europa continúa en su línea de inmovilismo, indicaremos lo que debería hacer España para salir del marasmo en el que se encuentra en este momento terrible de nuestra vida política por la incapacidad del Gobierno para entender la crisis económica que vivimos y hacerle frente de forma racional con el apoyo y concurso del pueblo español y todas las fuerzas políticas, económicas y sociales. .


Angel Gimeno Marín
Profesor, Ingeniero,Economista
Empresario, Máster y Pade en Economía y Alta Dirección
Miembro de Greenpeace
Ex Consejero de Economía y Hacienda de la Diputación General de Aragón