La presencia habitual del expresidente
José María Aznar en el palco del Real Madrid, donde
Florentino Pérez siempre le agasaja con un sitial de honor (en el último derbi, estuvo a la derecha del mandatario blanco, seguido de su mujer
Ana Botella), no parece hacer demasiada gracia a otros dirigentes del club de Concha Espina.
“Además de que parece ser gafe para el equipo, no entendemos la exquisitez y eltrato de privilegio del presidente Pérez hacia un señor que hace ya muchos años que dejó de ser jefe del Gobierno…”, subrayaba un miembro de la junta directiva del Madrid.
“No gustan a muchos directivos y a socios preferentes del club su prepotencia y sus alardes en la zona vip del Santiago Bernabéu… Da la impresión de que quiere presentarse a las próximas elecciones para dirigir el Madrid…”, como se comentó antes de que Pérez volviera por segunda vez a la 'Casa Blanca'.
La misma persona, relativamente cercana a Florentino Pérez, sostiene que lo que debe hacer un expresidente del Gobierno es irse con el público, pagar su entrada, “máxime en los tiempos que corren… El Real Madrid no puede hipotecar su imagen con un dirigente político tan significado como Aznar, que esrepudiado por mucha gente…”.
Eso era el sábado 27 de febrero. Unas horas más tarde, se colgaba en un diario de la Red un vídeo realizado por su antiguo 'empleado' y amigo Álvaro Pérez 'el Bigotes' en el que se veía a su hija Ana y a su marido, Alejandro Agag, disfrutando de un paseo por el mar de Marbella en el yate del jefe de la Gürtel, Francisco Correa. La relación de amistad y compadreo quedaba clara.
¡Precisamente en estos momentos...!
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